Letras ígneas

.

entrar es fácil... salir es difícil...

.

…íngrimos colores sin luz. rosa negra muy sola sobre el ataúd. los demonios abren la tapa y encuentran yaciendo mi soledad entre mi capa y la tapa del catafalco

y huyen despavoridos al escuchar apenas el eco de mi cataléptica voz, como un revuelo de ángeles mudos con sus caras reconfiguradas

rudos tonos de fe que se desploman del cielo entre mis manos a la deriva. hurgando las cenizas de la infraconsciencia. confundido se desliza.
hundido en un sumidero azul, busca un fantasma de silicio.
reteniendo sus clanes de luces con un hilo rojo pálido,
contra un ovillo de perfil rosa

en el ángulo más quieto de mis párpados
cuatro Zefirot peregrinos se agolpan
arqueándose
en arcanos mayores y menores / divinamente
sobre mi corazón de luz en flor
para transmutarlo,
para enraizarme en sus arterias y su voz

en un instante propicio, en un minuto dado en que todo el mundo reaparezca, y me llame...

pero por ahora que no me llame nadie, que me quemo en la propia voz mía
que no me pasen llamadas de nadie porque estoy emergiendo
del fondo de la oscuridad a la raíz complacida de mi pequeñez

justo ahora estoy subiendo al agónico tacto de una mina a punto de explotar, con sus pétalos deshojados, con media flor en el regazo. una menuda letra al hombro y un te quiero huyendo...

y subo más, a las inmediaciones del fuego que embravecido espera, las letras ígneas de su nombre para renacer sin prisa, imperfecto pero habitable.
con todos los sentimientos míos que ella pueda atrapar


.